Un soneto dedicado a Salvador Cisneros Betancourt.
Capítulo del libro “El puñal en el pecho. Imaginarios políticos y rebeldía anticolonial en Puerto Príncipe (1848-1853)".
Cuando en estos instantes, de seguro surja de vuestros corazones una bendición espontánea para todos los grandes precursores d...
Camagüey, señores, tiene su pasado... que ya está pasado, hablando con franqueza. Nosotros constituimos ahora un pueblo que pu...
...más vida cuanto más muerte.
Mariano, así nació la poesía: / humo de sangre que la vida exhala / y luego se depura todavía / y asume voz al remontar el ala...
Sólo sabrás dos cosas: de amor y de belleza. / Lo demás... nada importa. Toda la vida es / amar; sentir lo bello; tener una tr...
Tú a quien el mundo enajenado oía en profundo y sublime arrobamiento, y cuyo excelso y poderoso acento a la asombrada Europ...
Volver a estar en Camagüey fue un extraordinario regalo de la vida...
Al escribir nos forjamos siempre un ideal auditorio... En este ilusorio teatro plagado de seres que nos van a escuchar, sentam...
Para todo eso debe Vd. aconsejar a los hombres de la situación —sus amigos— que vale la pena que el gobierno haga algunos sacr...
Y desde entonces fue más ardiente, Cuba adorada, mi amor por ti.