El nombre de los padres es una obligación para los hijos, y no tiene derecho al respeto que va por todas partes con la sombra del padre glorioso, el hijo que no continúa sus virtudes. De dos cubanos jóvenes de la emigración no podrá decirse nunca esto, ni de Arístides Agramonte, hijo de aquel fuerte y seductor Eduardo que está aún como vivo en nuestros corazones, ni de Ventura Fuentes, hijo de uno de los patriarcas de la emigración, de un hombre que pasma por la variedad y modestia de sus talentos, de un cubano que, tras veinticinco años de amarguras, aspira a la independencia de su tierra con la fe bravía y juvenil con que le dio toda su fortuna en días mejores, de Félix Fuentes. En un mismo día, en el edificio suntuoso del millonario escocés que empezó la vida de peón, el autor optimista y contentadizo de “La Democracia Triunfante”, recibieron su título de médico, después de laureados estudios, los dos jóvenes cubanos: Fuentes, que desde sus primeros colegios ganó y mantuvo, con el estudio ardiente, su puesto principal; Agramonte, que en competencia reñida, sacó en el brazo alto uno de los premios de la Universidad. En el aula extranjera sostuvieron los dos el renombre del estudiante de Cuba: en el mármol extranjero aprendieron los dos a remendar los brazos rotos, a reanimar los pechos desmayados, a curar las heridas. —Cuando, con justas lágrimas de orgullo, veían desde sus palcos los padres virtuosos el premio al talento y la constancia de sus hijos; cuando seguían al arrogante Arístides los ojos enamorados de su madre, la señora Matilde Simoni de Castillo, y enviaba el alma a su hijo Ventura, que en la ciencia pone toda su pasión, la compañera nobilísima del indómito emigrado: la señora Isabel Machado de Fuentes; cuando se oía por sobre el aplauso sereno de los que viven en su país, el aplauso, más largo y tenaz, con que los cubanos saludaban la entrada en la vida de sus compatriotas victoriosos, —el dolor de la tierra madre ausente velaba, como un crepúsculo, la alegría incompleta de la tierra extranjera. El hombre, fuera de su patria, es como un árbol en la mar.
Sobre Arístides Agramonte Simoni (En casa, 11 de junio de 1892)
5Sobre Arístides Agramonte Simoni (En casa, 11 de junio de 1892)
5Entre flores y aplausos concluyó una hermosa y elegante señorita uno de los discursos de honor, el de francés en el Colegio de St. Mary, discurso lleno de naturalidad y bellezas literarias, pronunciado en parisiense exquisito. Era la cubana Luisa Clementina Ros, que terminaba brillantemente sus estudios. Era la nieta que honraba la memoria de aquel hombre sincero que en el destierro ayudó a aliviar las necesidades de los emigrados, que en sus lecciones de religión y de moral nunca olvidó a su Cuba que luchaba por la libertad, que como pastor desinteresado recordaba en el púlpito, con acentos cristianos y patrióticos, la hecatombe tristísima y conmovedora de los ocho estudiantes que cayó en el suelo extranjero amando a su tierra, Joaquín Palma.
Ha de haber pocos goces para una buena compañera como el de visitar al esposo en el lugar donde de todas partes se alaba y publica su mérito. Ni hay para la virtud de un hombre premio más grato que verla renacer en la delicadeza y ternura de una bija. Consuelo Serra, y su distinguida madre, ven hoy de cerca, recién llegadas de Cuba, cómo vive el fundador de “La Liga”, y cómo trabaja, para ir alzando su casa y ensanchando la de los hombres.
Juntos siempre, leyendo y juzgando, van a sus estudios, de altas letras y de cosas hondas, nuestros dos amigos, y amigos del hombre, Manuel González y Juan Bonilla. Juntos, del trabajo del día, vuelven, con su Spencer o su Plutarco, con su Volney o su Beaulieu, a la honradez ejemplar de sus hogares. Juntos echan atrás la ira y el odio, desde la cumbre y fortaleza de su corazón. Y juntos, con pocas horas de diferencia, acaban de perder a sus hijos queridos. La criaturita estaba allí, en Ia casa de Juan, en la cuna donde lo pusieron al nacer, vestido como en vida, para que padeciese menos del viaje la madre dolorosa, tendido sobre la cuna el velo rosado: el padre, sin llanto, meditaba al pie: los libros, no abiertos hoy, esperaban en vano sobre el escritorio: los cuadros estaban vueltos a la pared: los amigos traían flores. Y en la casa de Manuel, el apaciguador, el justo, el consejero, pensaba el pobre padre en aquel ataúd blanco que ya nunca dejará de ver: la madre, la mujer buena y fuerte, se abrazaba a la criatura que le queda. iluego, cuando padezcan o mediten, cuando se les levante enojado el corazón contra la mucha pena de este mundo, sentirán los padres silenciosos el roce de las alas!
En casa, en Patria, Num.14, New York, Junio 11 de 1892, p.3. Tomado de Obras Completas. La Habana, Editorial de Ciencias Sociales, t.5, pp.373-375.
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Comentarios
María Antonia Borroto
3 añosLa sección En casa, del periódico Patria, es una de las zonas más atractivas del periodismo martiano. Es una gacetilla, donde se cuentan detalles de la vida de los exiliados cubanos, se encomian las virtudes de los participantes en la gesta anterior y se celebran los crecientes triunfos de los más jóvenes, se refiere, por ejemplo, cómo logran completar sus estudios y hacerse personas de bien lejos de la patria. Son páginas preciosas, aparentemente sencillas, y muy cálidas, sobre todo muy cálidas, incluso amorosas.
María Antonia Borroto
3 añosY Martí logra también incluir algo del acontecer insular. Hay una frase suya que me gusta muchísimo, referida a quienes permanecían en Cuba y que me tomo el atrevimiento de citar de memoria: "porque tiene hombres tales, puede Cuba ser libre". La virtud: consustancial a la idea de la indepedencia, garante de ésta. He ahí, tal vez, uno de los gérmenes de la virtud doméstica esgrimida luego por Manuel Márquez Sterling y otros intelectuales: A la injerencia extraña, la virtud doméstica.
Ernesto Piñero
3 añosNótese para las transiciones el empeo de un recurso tipográfico en desuso: el bigote, sustituido en las ediciones actuales por el blanco de transición.
María Antonia Borroto
3 años@Ernesto Piñero Así está en Patria. En la Obras Completas aparecen espacios en blanco. Buscamos un recurso similar, para conservar, en lo posible, la apariencia de En casa. Muchísimas gracias por la acotación.
María Antonia Borroto
3 añosEs impresionante la trayectoria del Dr. Arístides Agramonte. Un discípulo suyo, Arturo Curbelo Hernández —colaborador y continuador de su obra en la Cátedra de Bacteriología de la Universidad de La Habana—, preparó esta síntesis biográfica, que incluimos como anticipo de varias publicaciones que en breve haremos dedicadas a este gran profesional, casi desconocido hoy en día por los camagüeyanos. Síntesis biográfica del Profesor Arístides Agramonte y Simoni Nació el doctor Agramonte en la heroica Ciudad de Camagüey el día 3 de junio de 1868, hijo de Eduardo Agramonte y Piña, médico, que fue uno de los primeros patriotas en lanzarse a la Revolución, junto con su primo Ignacio Agramonte y Loynaz y el Marqués de Santa Lucía, cuando el Camagüey se unió a la Revolución del 68. Murió en acción de guerra con el grado de Brigadier General el 8 de Marzo de 1872 en la acción de San José del Chorrillo. Fue su madre Matilde Simoni y Argilagos, virtuosa dama, quien prefirió su regreso a Cuba y compartir los azares de la guerra con su esposo a la vida suntuosa de las cortes europeas en la época de Napoleón III. El pequeño Arístides heredó esta fuerte raigambre cubana de sus padres, como lo demostró en la primera ocasión que tuvo de regresar a su patria, lo que hizo, con el ejército americano en 1898, después de la guerra hispano-cubano-americana. Los primeros años los pasó con su madre en los campos de la Revolución siguiendo a su padre en todos los vaivenes de la guerra. Hecha la madre prisionera y obtenida su libertad, se trasladó con su pequeño hijo a la Ciudad de Mérida, Yucatán, haciendo aquí sus estudios elementales en el colegio El Afán. De ahí nació su gran afecto a los Estados Unidos Mexicanos. En 1880 se trasladaron madre e hijo a la Ciudad de Nueva York, habiendo terminado en las escuelas públicas su educación primaria, graduándose de Bachiller en Artes en 1886. Sus estudios Superiores los cursó en la Columbia University, graduándose de Doctor en Medicina en junio de 1892, con honores especiales, como el premio Harsen. Su hoja de servicios es la siguiente: • Interno por oposición del Hospital Roosevelt, Servicio de Medicina, 1892-1893, New York. • Interno por oposición del Hospital Roosevelt, Servicio de Cirugía, 1893-1894, New York. • Médico de Visita (Departamento de Enfermedades de la Infancia), Hospital Bellevue y del West Side Dispensary, 1894-1898, New York. • Inspector Médico por oposición del departamento de Sanidad de la Ciudad de New York, 1895-1897. • Bacteriólogo del Departamento de Sanidad de la Ciudad de New York. Por oposición, 1897-1898. • Médico agregado al ejército de los Estados Unidos para tomar parte en la guerra cubano-hispano-americana en abril de 1898. Renuncia en octubre de 1902. • Encargado del Laboratorio de Anatomía Patológica y Bacteriología de la División de Cuba establecido en el Hospital No. 1 en 1899, hoy Hospital Universitario. • Licenciado en Medicina, Universidad de la Habana, por haber efectuado los ejercicios de reválida, enero 25 de 1900. • Doctor en Medicina, Universidad de la Habana, por haber efectuado los ejercicios del Doctorado, julio 30 de 1900. • Miembro de la “Comisión de Oficiales de Sanidad del Ejército Americano” para el estudio de las enfermedades infecciosas agudas de la Isla de Cuba, establecida en los cuarteles de Columbia, Quemados de Marianao, el 25 de junio de 1900, dedicado preferentemente al estudio de la Fiebre Amarilla, 1900-1901. • Médico de Visita del Hospital No. 1, Enfermedades Tropicales, agosto de 1900. • Catedrático Titular de Bacteriología y Patología Experimental, en abril 9 de 1901 hasta 1925 en que fue dividida la cátedra, desempeñando desde entonces solamente la de Bacteriología. • Secretario y Médico Laboratorista Clínico de enfermedades infecciosas en agosto 2 de 1902. • Delegado del Gobierno al XV Congreso Internacional de Medicina celebrado en Lisboa, Portugal, en 1906. • Delegado del Gobierno al XIV Congreso Internacional de Higiene y Demografía celebrado en Berlín, Alemania, en 1907. • Delegado del Gobierno al XVI Congreso Internacional de Medicina celebrado en Budapest, Hungría, en 1909. • Presidente de la Comisión de enfermedades Infecciosas y por ende Vocal de la Junta Nacional de Sanidad, 1909. • Miembro de la Comisión Permanente Internacional de Congresos de Higiene y Demografía, en representación de la República de Cuba, 1910. • Miembro del Comité Ejecutivo del II Congreso Médico Nacional, Habana 1911. • Presidente de la Comisión para el Estudio del “606”, 1911. • Delegado del Gobierno a la Conferencia Sanitaria Internacional, París,1911. • Otorgado el “Premio Breant”, Academia de Ciencias, Instituto de Francia, París, 1912. • Delegado del Gobierno al XVII Congreso Internacional de Medicina, Londres, Inglaterra, 1913. • Doctor en Ciencias (Honoris Causa) Universidad de Columbia, New York, 3 de Junio de 1914. • Delegado del Gobierno al II Congreso Científico Panamericano, Washington, de diciembre 27 de 1915 a enero 8 de 1916. • Presidente del IV Congreso Médico Nacional, Habana, 1917. • Miembro de la Comisión Nacional de Reclutamiento, en representación de la Facultad de Medicina, 1918. • Delegado Especial de la Junta Nacional de Sanidad y Comisionado Especial de la Secretaría de Sanidad y Beneficencia, en numerosas ocasiones, desde 1901 a 1916. • Vocal de la Comisión para el estudio del tratamiento de la Lepra por el mangle rojo, 1912. • Presidente de Honor del V Congreso Médico Nacional, Habana,1920. • Presidente del VI Congreso Médico Latino Americano, Habana, 1922. • Secretario de Sanidad y Beneficencia (en el Gabinete de Reajuste Moral) 1922-1923. • Delegado del Gobierno al centenario de Pasteur, celebrado en París y Estrasburgo, 1923. • Presidente de Honor de la VII Conferencia Sanitaria Panamericana, Habana, en 1924. • Delegado del Gobierno a la Conferencia Internacional de Medicina Tropical, Kingston, Jamaica, 1924. • Delegado del Gobierno al III Congreso Científico Pan-Americano, celebrado en Lima, Perú, 1924. • Delegado del Gobierno de Honduras a la VII Conferencia Sanitaria Pan- Americana, noviembre 5 al 20, 1924. • Doctor en Ciencias (Honoris Causa) Universidad Mayor de San Marcos, Lima, Perú, 1925. • Doctor en Leyes (Honoris Causa) Universidad de Tulane, Louisiana, 1929. • Profesor Jefe del Grupo de Cátedras de Medicina Tropical. Universidad de Louisiana, 1931. • Muere en New Orleáns, en agosto 17 de 1931. Tomado de https://bit.ly/3qrpk5h